Consiste en convertir la idea específica en algo alcanzable, de modo que nos enfocamos en la construcción visual del producto una vez el problema está detallado y se sabe quiénes pueden impactar e influenciar el tema a tratar, se exploran maneras de resolverlo a través de la ideación y comprobación de alternativas, aquí es donde llevamos a la práctica el producto a nivel prototipo volviendo tangible las ideas obtenidas y aprobadas. Es ver cómo responde el diseño en un nivel mínimo, realizando validaciones con expertos, de tal forma que obtenemos un feedback real durante todo el proceso hasta lograr el acabado deseado por el consumidor.